Simon Yates saca brillo al trabajo del Orica en la última etapa gallega de la Vuelta

La gloria en la Vuelta ciclista a España es para los valientes y para los que se lo trabajan. Estos dos requisitos los ha cumplido con creces Simon Yates este 25 de agosto de 2016 en la última etapa con final en Galicia. El británico del Orica ha hecho bueno el trabajo de su equipo durante la jornada de 163,2 kilómetros entre Monforte de Lemos y Luintra. [Vuelta a España 2016 en directo, a partir de las 15:00h. en Teledeporte, La 1 y RTVE.es]

Yates, de 24 años, se impuso en solitario con un tiempo de 4h.05.00, por delante del español Luis León Sánchez (Astana). Los favoritos entraron juntos, sin novedad, a 29 segundos, por lo tanto el colombiano Darwin Atapuma (BMC) es líder con 28 segundos sobre el español Alejandro Valverde (Movistar) y 32 respecto al británico Chris Froome (Sky).

El día después del desagradable capítulo del bolardo de Lugo estuvo marcado en la salida por las ausencias (a los retirados tras la caída se unió el colombiano López) y por el homenaje de toda la carrera a Italia y a las víctimas del fatal terremoto.

Vuelta 2016 | La caída de Kruijswijk y el bolardo no señalizado, en boca de todos en la Vuelta

Ya con la etapa en marcha, el día estaba siendo protagonizado por el calor asfixiante debido a la temperatura alta y la humedad —tan típicos de Ourense en verano—. Parecía un día más en la oficina: el pelotón rodando al ritmo del equipo del líder, BMC, y por delante una fuga con muchas posibilidades de éxito.

Todo tranquilo hasta que se llegó a las rampas que conducían al Alto de Alenza. Allí el Orica sorprendió al cambiar el ritmo al frente del grupo, colocar de punta las orejas a más de uno y poner en riesgo el éxito de los escapados.

La escapada, antes de que el bravo Omar Frailes lo intentara en solitario, estaba compuesta por 11 integrantes: Laurent Didier (Trek-Segafredo), Andrey Zeits (Astana), Kévin Reza (FDJ), Jan Bakelants (Ag2r-La Mondiale), Alberto Losada (Katusha), Gert Dockx (Lotto-Soudal), Mathias Frank (IAM Cycling), Valerio Conti (Lampre-Merida), José Mendes y Gregor Muhlberger (Bora-Argon 18); y el mencionado Omar Fraile (Dimension Data).

El corredor vasco coronó el cabeza el alto con casi minuto y medio de ventaja sobre los fugados y casi cuatro sobre el gran grupo. Tras pasar la pancarta del Gran Premio de la Montaña se descubrió una carretera estrecha de esas que aman los aficionados pero temen los corredores, que se lo digan a Alberto Losada que pudo evitar in estremis la caída pero perdió comba con el resto de fugados al salirse hacia la cuneta.

Las riendas las tomaron los ciclistas del Movistar cuando la carretera se volvió a empinar a la vera del río Sil, camino al Mirador de Cabezoás. Como consecuencia, el pelotón redujo considerablemente el hueco con los escapados (menos de 2’ para Fraile) al mismo tiempo que perdía componentes por la parte trasera.

Un sube y baja contínuo que dejará huella

«Hoy ha sido un día para los corredores de la clasificación general, todos hemos tenido que estar atentos y bien colocados«, reconoció
Contador en meta. El de Pinto remarcó que tanto por el calor como por la exigencia del recorrido de la etapa ha sido «un día de mucho desgaste».

Justo antes de llegar a la cima del mirador, Omar Fraile fue atrapado por el trío Bakelants, Zeits y Frank. Precisamente este último lanzó el ataque en ese momento para escaparse en solitario cuando el pelotón rodaba tirado por el Movistar a menos de un minuto.

El suizo luchó por la victoria con todo al aumentar su ventaja hasta el minuto y medio antes de llegar a los dos últimos y definitivos repechos. En el más duro, en el segundo (8% de desnivel) se arruinaron las opciones de Bakelants y Zeits. Tan solo Mathias Frank, con medio minuto de adelanto, podría robarle la victoria al pelotón.

De ese grupo saltó Dani Moreno primero y Simon Yates (Orica) después. Los dos equipos que más habían trabajado querían la victoria. El británico del equipo aussie subió las últimas estribaciones ‘sin cadena’ y se colocó en solitario a la cabeza. De ahí hasta la meta nadie le hizo sombra por lo que pudo levantar tranquilamente los brazos en meta.

La Vuelta deja Galicia por este año

La 71ª Vuelta abandona de Galicia con una séptima etapa complicada de media montaña que llevará al pelotón desde Maceda (Ourense) hasta Puebla de Sanabria (Zamora) con un recorrido de 158,5 kilómetros.

De nuevo una jornada con un kilometraje bajo que unido al constante sube y baja puede propiciar, al igual que el día anterior, una etapa en la que se ruede muy deprisa y cree nerviosismo en el pelotón.

Los aspirantes al triunfo final deberán estar atentos para evitar cualquier sorpresa que pueda deparar un recorrido con muy poco llano y la ascensión de tres puertos de tercera categoría, el último de ellos a 18,5 kilómetros del final.

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