Hoy os traigo cinco juegos perturbadores que ya sea por lo bizarros que son o por su terrorífica historia no se os quitarán de la cabeza. ¿Imagináis a un pez con cara de persona que se convierte en rana? ¿Y si además es nuestra mascota? ¿Y qué tal una pizzería maldita? Seguro que lo último empieza a sonarte.