Rafinha se puso a dar toques a un chicle en el entrenamiento del Barcelona ante la mirada y la risa de Messi. El centrocampista dio tres toques al chicle y se lo volvió a meter en la boca. En el segundo intento, Rafinha sólo consiguió dar un toque antes de que se le cayera al suelo… y tirara el chicle a la banda.