«Creo que a él le habría gustado que en una semana llamada ‘primavera republicana‘, en el barrio de la Barceloneta, al lado del mar, su amado público se haya reunido para quitarle el nombre a un facha a esta calle y ponérselo al querido Pepe Rubianes». Estas han sido las palabras que pronunciaba la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, este domingo en la inauguración dedicada al humorista y actor, que murió en 2009 con 61 años a causa de un cáncer de pulmón, y que se han convertido en objeto de una fuerte polémica. La alcaldesa de la Ciudad Condal renombraba la vía que hasta ahora había sido conocida como carrer del Almirall Cervera, y a la que ahora da nombre el actor galaico-catalán, nacido en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra).