«Nadie sabe por qué el resultado no ha sido el que daban las encuestas. Y nosotros tampoco».
Esta frase de Pablo Echenique resume en pocas palabras el estado de estupefacción que vive Podemos en el día después de las elecciones del 26 de junio de 2016.
El partido de Pablo Iglesias aspiraba al sorpasso al PSOE y se ha estrellado contra unos resultados que señalan el fracaso de la alianza entre Podemos e IU, que ha perdido 1,2 millones de votos.
Noqueado todavía por el golpe, Podemos ha dejado la autocrítica para más adelante. Su primera reacción ha sido encargar una encuesta para averiguar por qué una alianza concebida para superar al PSOE ha retrocedido respecto a diciembre.
Aunque no ha dicho expresamente que el error de Podemos haya sido haberse confiado con las encuestas y, por tanto, haber planificado la campaña como si fueran por delante del PSOE, Echenique lo ha insinuado al señalar que «todos» los sondeos y los analistas políticos se han equivocado durante las últimas semanas. No sólo Podemos.
En cambio, Echenique sí parece tener más claras las causas de la importante subida del PP. A su juicio, la responsabilidad ha sido del PSOE porque ha «engordado a la derecha» con una campaña de continuos «ataques» a Unidos Podemos.
En cambio, ha minimizado el intento de Unidos Podemos de movilizar a la izquierda con una campaña de polarización con el partido de Mariano Rajoy. Hasta el punto de plantear los comicios como un «referéndum» entre el PP y Unidos Podemos.
«No se nos puede achacar esa responsabilidad. Estaría en manos de otra fuerza política», ha manifestado Echenique preguntado sobre si la campaña de Unidos Podemos ha propiciado un reagrupamiento de la derecha para combatir el ascenso de la candidatura de Iglesias.
Respecto a los pactos postelectorales, Podemos no ha dado mucho margen a que haya un presidente del Gobierno distinto a Rajoy.
Aunque ha mantenido hoy su disposición a «tender la mano» al PSOE para formar un gobierno progresista, al mismo tiempo ha dado un portazo a la posibilidad de apoyar el pacto de la pasada legislatura entre Pedro Sánchez y Albert Rivera. Ni siquiera como mal menor.
Echenique ha dicho que no van a votar a favor de un «programa de derechas escrito por Garicano aunque el presidente sea Sánchez».
«Si se nos pone de nuevo encima de la mesa el resultado va a ser el mismo», ha subrayado el número tres de Podemos, que sólo contempla una posibilidad de acuerdo si «además de un presidente socialista» se les presenta «un programa socialista».
JUAN CARLOS MONEDERO LO TIENE CLARO
El cofundador y exdirigente de Podemos Juan Carlos Monedero considera que la coalición Unidos Podemos ha hecho una campaña «errónea» de cara a las elecciones generales del 26J, por «primar el marketing antes que el contenido», y también que ha pecado de «infantilismo» al creerse unas encuestas que eran amables.
Además, cree que la campaña ha sido «un poco desdentada» hacia el PSOE, un poco similar a lo que le ha pasado a Ciudadanos con el PP, porque los nuevos partidos querían quitarles votos a los antiguos y para eso criticaban a los dirigentes, pero no a los partidos.
