Mila Valcárcel presenta selección de poemas y relatos breves donde demuestra una escritura poderosa, valiente. En el prólogo, la poeta Noemí Trujillo nos cuenta: «El lector de Funambulismos debe ser valiente: un acróbata al que no le asusten las dudas, las mentiras, las debilidades y los miedos del alma humana.
Porque Mila Valcárcel dispara a la memoria (un disparo de amnesia), busca ser desobediente, desahucia la estética en cada poema: lo deja todo en la penumbra. En estos versos todo es extravagancia, una herida que supura, un laboratorio de memorias y verbos sometidos a un polígrafo.»