El Reino Unido ha elevado su alerta terrorista, de «sustancial» a «severa» ante la evolución de los conflictos en Siria e Irak. El Gobierno de David Cameron considera «altamente probable» que se produzca un atentado en su país. Londres ha dejado claro, sin embargo, que no hay informaciones de ataques inminentes.»Lo que estamos encarando en Irak con el Estado Islámico es la mayor amenaza para nuestra seguridad que hemos visto hasta ahora.