Que el código de derecho islámico que regula las leyes, la moral y la conducta de los ciudadanos de esta república chií, traiga ahora de cabeza al Consejo de Guardianes en materia laboral, -uno de los últimos ‘avances’ en materia de igualdad de género-, es mera anécdota.
La sharia, la base de la jurisprudencia islámica, no tiene piedad alguna con aquellos que son acusados bajo el cargo Moharebeh (enemistad con Dios, o corrupción sobre la tierra»). Son casi siempre homosexuales, adúlteros o fornicadores impenitentes, que son lapidados o ahorcados los miércoles y los domingos, los días negros de Irán.
Aunque hay otros casos, como el que nos ocupa, y que según recoge ‘Liveleak’ en el vídeo que abre estas líneas, tiene por protagonista a una mujer de esos lares que decidió protestar por estos motivos dándose un paseo de tres horas por la ciudad de Teherán, como Dios la trajo al mundo. Su periplo acabó cuando la policía religiosa le salió al encuentro. Ahora, segun el medio citado, espera en el corredor de la muerte.
Bajo estas líneas, y esta vez en la ciudad de Karaj, hizo lo propio otra mujer pitillo en ristre. En esta ocasión se ignora la suerte que corrió.
Quizá, quién sabe, pase también a engrosar la larga ista de muertos extrajudiciales, que se unen a las ejecuciones oficiales -públicas, en muchos casos- que sitúan el país persa como el segundo del mundo donde más personas pierden la vida incluso en cámaras de gas.
El incremento de ejecuciones en los tres últimos años es harto alarmante:dos personas al día son ejecutadas, como media.
