El tenista argentino dejó un golpe para la historia en el primer juego del tercer set del cuarto partido de la final de Copa Davis, que este 27 de noviembre de 2016 dio la ensaladera a Agentina, frente a Croacia.
Si Del Potro fuera ciclista siempre ganaría el maillot de la combatividad del Tour. El tenista argentino nunca desfallece y siempre tiene una gota de sudor más para pelear hasta la extenuación. Y eso es lo que ha hecho en el cuarto partido de la final de la Copa Davis.
Tras perder los dos primeros sets, ha empezado el tercero con un punto para la historia del tenis. Un globo por debajo de las piernas desde su propia línea de fondo que dejó a Cilic y a Zagreb totalmente mudos. Un golpe antológico para ver una y mil veces y que inició una remontada alucinante que le ha llevado a ganar el partido por tres sets a dos.