La caída de consumo está obligando al cierre de grandes empresas. Las empresas míticas tienen problemas de solvencia. Recientemente se conocía que Fagor tenía trabas en su financiación, hace unos meses era Roca, Panrico y Pescanova, esta última con un agujero de mil millones y su presidente investigado por fraude. Los baluartes de nuestra economía acusan esta segunda fase de la crisis.