Una cámara de seguridad de un restaurante de Baojí (Shaanxi, China) captó el momento en que una mujer embarazada zancadilleó de manera intencionada a un niño de cuatro años, unas imágenes que se han viralizado y han causado gran controversia en ese país asiático, informa el portal What’s on Weibo.
El incidente ocurrió el pasado 19 de abril, cuando el menor entró corriendo en el local y movió las cortinas transparentes de la puerta del establecimiento, que golpearon el rostro de la mujer y provocaron que derramara sobre sí un poco de comida.