Propio de la gente que lleva el veneno del nacionalismo y el supremacismo en sus venas. Ante la debacle de su Barça, ese pseudo-club deportivo, porque en realidad es un ente político más como ya lo definió Vázquez Montalbán, el tal Jota Jordi, tertuliano habitual de ‘El Chiringuito’, no pudo contener las lágrimas y se puso a llorar como un bebé. El ridículo, tanto dentro como fuera del césped de Anfield, era histórico…